miércoles, 31 de marzo de 2021

Astro lunar



Bajo tu luz nada puede pasarme, 
incluso si no estás te encuentras presente, 
tu graciosa protección calma mi mente 
y de noche me haces levantarme.

En tu regazo permíteme sentarme
y saborear el néctar de tus lágrimas
y de tu núcleo espantar a las ánimas 
y por fin de este tormento liberarme.

En una conexión psicosomática,
me sana, me acompaña, me protege,
que, como el mar, me ahoga y me sumerge, 
poseedor de oscuridad esporádica.

El aire de tu ausencia me duele respirar 
y con tu sonrisa brindas salvación,
porque eres digna de mayor adoración,
con orgullo te grito: “¡Ven a mí, astro lunar!”.

viernes, 19 de marzo de 2021

La sonata espectral y el piano maldito

Guiones teatrales en el antiguo Tallereando 


Ricardo Upton Castro

 

PERSONAJES
  • Maestra de piano
  • Alumno 1
  • Alumno 2
  • Conserje


La maestra de piano porta un vestido color gris y zapatillas color blanco; el Alumno 1, shorts color café y camiseta negra; el Alumno 2, camiseta color verde oscuro y shorts beige; el conserje, camisa blanca, overol y zapatos de trabajo color negro.

ESCENA 1

La escenografía representa el interior de un salón: hay pupitres, un escritorio y un piano.

MAESTRA DE PIANO: ¡Al fin verano! (abre los brazos) Los alumnos de la Leona Vicario, ¡tan felices por el último día de clase! ¡Los niños disfrutarán tanto de sus vacaciones...! Tengo el presentimiento de que este verano del 65 será una gran época para ir a la playa, o simplemente para salir de Mexicali. (Pausa. Mira el piano) ¡Me encantaría tocar mi amado piano una última vez antes de irme, pero tengo algo de prisa...! (Se acerca al mueble) Bueno… una canción y ya, aunque... tal vez no debería... ¡Qué más da, ya no hay nadie esperándome! (Se sienta frente al piano) ¡Tengo todas las ganas del mundo y bastante tiempo!

La maestra empieza a tocar, moviendo la cabeza embelesada con las notas musicales.

Entra el conserje mientras la maestra hace una pausa para revisar sus partituras. El hombre toca la puerta, pero la maestra no lo escucha.

CONSERJE: ¿Se encuentra alguien dentro? (No recibe respuesta) Bueno, creo que ya me iré a casa. Pero antes cerraré con seguro todas las puertas de la escuela.

Cierra la puerta con seguro y sale. Las luces se apagan.

 

ESCENA 2

Las luces se vuelven a encender, ya han pasado tres horas. La maestra de piano está sola en el escenario.

Bastante sorprendida al principio, paulatinamente su sorpresa desaparece.

¡No puede ser, ya han pasado tres horas! ¡Ya debería estar en casa...! (Se pone de pie y toma sus pertenencias) Bueno, creo que ya me iré (Revisa que no le falte nada. Voltea de nuevo a ver el piano) ¡Extrañaré tanto mi viejo y amado piano...! (Se acerca a él y pasa la mano lentamente sobre su superficie, mientras habla) ¡Lo extrañaré mucho! ¡Desearía simplemente poder tomarlo y llevarlo a casa...! ¡Es un piano muy especial para mí! En él toqué mi primera canción como maestra. ¡Nunca olvidare ese día! 

Observa el mueble en silencio por unos instantes y suspira. Se dirige hacia la puerta e intenta abrirla, sin lograrlo. 

¡¿Qué?! (Sumamente sorprendida y preocupada) ¿Por qué no puedo abrir la puerta? ¿A...caso…? ¡No, no puede ser! A menos que… (Pausa) ¡Me quedé encerrada...! Pero... ¿cómo...? (Deja sus cosas y mira hacia todos lados, buscando) ¡Tengo que encontrar la manera de salir de aquí, y tiene que ser rápido! ¡No creo poder resistir tanto tiempo aquí, no tengo ni una sola gota de agua y ni un solo bocado de comida...! (Desesperada) ¡No sé qué haré...! ¡Tengo que darme prisa, mi tiempo está contado...! (Muy preocupada) ¡Tiene que haber algo que pueda ayudarme a salir...! 

Empieza a caminar por el salón, buscando.

¿Tal vez debajo del piano... o algo que hayan dejado los alumnos en sus asientos...? Pero... aunque encontrara algo, ¿cómo podría usarlo...? (Se acerca a los pupitres) No creo que los alumnos hayan dejado algo, ya que les advirtieron que todos los objetos encontrados después de clase serían recogidos y donados. (Bastante nerviosa y presurosa) ¡Tal vez alguien esté cerca y pueda ayudarme a salir!

Se acerca a la puerta y empieza a gritar.

¡Ayuda...! ¡Ayuda...! ¡Sigo aquí...! (Pausa, esperando respuesta. Al no recibirla, se dirige hacia el otro extremo, a las ventanas, que golpea con fuerza) ¡Ayuda...! ¡Ayúdenme a salir...! ¡Aquí estoy...! ¡Ayuda...! (Muy desconsolada, llorando, y desesperanzada) ¡No puede ser cierto...! (Se revuelve los cabellos) ¡Nunca saldré de aquí...! (Se deja caer lentamente al suelo)  ¡Voy a morir...!

Se cubre el rostro con las manos y llora. Se apagan las luces.

 

ESCENA 3

Al encenderse las luces, la maestra está caracterizada como fantasma, con una manta color blanco y sentada frente al piano. Entran dos alumnos en el escenario; el fantasma es invisible para ellos.

ALUMNO 1: (Un poco nervioso. Camina lentamente, tras el Alumno 2) No sé si deberíamos entrar... Hace un mes que el conserje encontró aquí a la maestra de música... Se murió de hambre porque se quedó encerrada... Y dicen que por las noches se puede escuchar que alguien toca la última canción que la maestra tocó... (El Alumno 2 se detiene y voltea a verlo. El Alumno 1 sigue contando) ¡Dicen también que nadie ha entrado aquí desde que eso pasó...! ¡La verdad, sí me da miedo...!

ALUMNO 2: ¡No seas gallina, los fantasmas no existen...! Además, ¡ya estás muy crecidito como para seguir creyendo en esos cuentos de niños...! ¡Vamos (se vuelve, para seguir caminando), verás que no hay nada!

ALUMNO 1: ¡Espera...! (Toma del brazo al Alumno 2, que se detiene) ¿Los salones no están cerrados con seguro?

ALUMNO 2: (Tranquilo, retira la mano del Alumno 1) Desde que eso pasó ya no cierran nada con seguro. (Ambos entran al salón y dejan la puerta abierta.) ¡Te lo dije, no hay nada! (El fantasma permanece inmóvil y los alumnos no lo miran) ¡Solo los pupitres y el piano, llenos de polvo! (Se acercan lentamente al piano, curiosos).

La puerta se cierra sola.

ALUMNO 1: (Muy nervioso) ¡¿Escuchaste eso?!

ALUMNO 2: (Muy nervioso también) ¡Sí...! ¡Ya me dio miedo, vámonos! (Camina hacia la puerta).

ALUMNO 1: (Sigue al Alumno 2, viendo hacia atrás) ¡Qué miedo!

Ambos corren hasta la puerta.

ALUMNO 1: (Intenta abrir la puerta, pero no lo logra. Muy nervioso) ¡No es posible!

ALUMNO 2: (Muy nervioso) ¡¿Qué pasa?!

ALUMNO 1: (Desesperado, tratando de abrir la puerta) ¡La puerta no abre, estamos encerrados!

Alumno 2: ¡¿Ahora qué haremos?!

El fantasma de la maestra comienza a tocar el piano. Los dos alumnos se vuelven y se pegan a la pared. Miran el piano aterrorizados y empiezan a gritar. Se apagan las luces.


TELÓN


Obra basada en el texto "Concierto fantasmal", de Nicole Montijo García, recración de la leyenda mexicalense de la maestra de piano de la Escuela Leona Vicario.

(Segundo grado de secundaria, 2020)