sábado, 18 de febrero de 2017

El deseo de Teresa



Una hermosa mañana en la ciudad de Mexicali, saltaba de alegría una niñita rumbo a la escuela. Su nombre era Teresa, de 8 años de edad; estudiaba tercer grado en la primaria Leona Vicario.
Teresa tenía un deseo muy especial. Su deseo era que nevara en la ciudad y que los ciudadanos contentos salieran con sus familias a disfrutar de ese momento, que podía ser único en Mexicali.
Los maestros y sus compañeros le decían que era “una soñadora”, que eso era imposible, disminuyendo sus esperanzas de hacer posible su deseo.
Saliendo de la escuela, Teresa se encontró con un ser raro, color verde, que podía flotar; era lo más parecido a un espíritu. El espíritu le dijo:
—Hola, soy Zayak y vengo a cumplirte tu deseo.
Teresa, paralizada, le contestó:
—¿Por qué me escogiste a mí?
—Porque tu deseo no solo te beneficiará a ti, sino a toda la comunidad —le respondió Zayak.
De repente empezó a nublarse y más tarde a nevar. La gente salía de sus casas, pero no tenían la misma expresión en el rostro que Teresa: estaban aterrados. Teresa se las tuvo que ingeniar para hacer que todos reaccionaran y comprendieran que su deseo era darles felicidad, no aterrarlos.
Escaló el cerro del Centinela en una parte donde todos la pudieran ver. A unos diez metros del piso empezó a gritar: “¡Damas y caballeros! ¡Hoy escalé el cerro para decirles que yo le pedí  el deseo de que nevara a un ser mágico! ¡No era mi intención aterrarlos!”.
La gente empezó a gritar que era una loca, que no era posible la existencia de un ser mágico. Teresa empezó a llorar y con la voz corta expresó: “¡Créanme, no estoy mintiendo!”.
De repente apareció Zayak. Todos se asombraron, porque lo que aseguró la niña no era mentira. Y Zayak les dijo: “Ciudadanos, Teresa me pidió este deseo con la intención de que disfruten la nevada con sus familias”.
La gente reflexionó y empezó a divertirse en familia, jugando con la nieve. Y para muchos algo espectacular fue cómo se veía el hermoso cerro del Centinela cubierto de blanco. Fue un día histórico que jamás se debe olvidar.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario