jueves, 12 de mayo de 2022

Mi vida en un par de hojas

Gustavo Buruel Delgadillo


Mi nombre es Gustavo Adrián Buruel Delgadillo. Nací el 10 de septiembre del año 2005 en Mexicali, Baja California. Mi familia está formada por mis padres (Odith Delgadillo Moreno y Jesús Marcos Buruel Dojáquez) y por mis hermanos (Marco Antonio y Carolina).

Comencé la primaria en el 2012 como estudiante del Instituto Patria del Noroeste, ubicada en Paseo de los Pinos. En esa época yo vivía en casa de mi abuela, la cual quedaba bastante cerca de ese colegio.

En 2015 mis padres, mis hermanos y yo viajamos a la ciudad de Tepic, Nayarit, debido a que Marco había sido seleccionado para ir a un torneo representando al estado de Baja California. Estuvimos allá una semana completa.

En 2016, mi hermano volvió a ser elegido para participar en otro torneo dentro de la selección estatal. Esta vez sería en la ciudad de Monterrey. Entonces mi padre no pudo acompañarnos debido a su trabajo.

En el verano de 2017 entré a la secundaria. El primer grado lo cursé en la misma escuela (Instituto Patria del Noroeste). Ese mismo año visitamos la Ciudad de México por razones laborales de mi padre.

En 2018 ingresé a segundo grado de secundaria, pero esta vez en el Instituto Salvatierra. Mis padres decidieron cambiarme a esta escuela por su equipo de basquetbol y la calidad educativa que ofrecían, además de que se ubicaba mucho más cerca de mi casa.

El primer año en este nuevo colegio fue muy difícil para mí, pues era totalmente diferente a todo lo que había vivido anteriormente: tenía que hacer nuevos amigos, los maestros eran más estrictos y las clases mucho más complicadas. Durante ese mismo ciclo escolar mi familia y yo nos trasladamos a Ciudad Juárez por el cumpleaños de mi prima. 

En 2019 entré a tercero de secundaria en la misma escuela, pero resultó mucho más sencillo para mí, pues –aparte de que la actividad era más fácil– ya ni me sentía tan solo, debido a que tenía muchos amigos que hacían que todos los días fueran mejores. Ese año me regalaron mi primera guitarra eléctrica, color amarillo con naranja.

Todo iba bien durante ese ciclo, pero en 2020 comenzó la pandemia por el COVID-19. Esto provocó que dejáramos de asistir a diario a la escuela.

En junio de ese año me gradué de la secundaria mediante una videollamada a la que nos conectamos todos los alumnos de la generación. Por haber egresado, mis padres me regalaron un piano, en el cual tuve que aprender a tocar por mi propia cuenta.

El 26 de agosto siguiente ingresé al curso de inducción de la preparatoria en la misma escuela y de igual manera tomamos las clases en línea, mediante videollamadas diarias.

Dos semanas después comenzó el semestre de manera oficial. Ahora estudiaríamos todas las materias que nos correspondían y conoceríamos a cada uno de nuestros maestros, iniciando una nueva etapa en mi vida.

Actualmente sigo cursando el primer semestre de preparatoria en el Instituto Salvatierra, mediante clases virtuales y tareas en línea. Es muy difícil vivir y trabajar de esta manera, pero es lo único que podemos hacer mientras la situación vuelve a la normalidad.

 Primer semestre de preparatoria (2020)

lunes, 21 de marzo de 2022

No se me ocurre nada

  Poemas en el antiguo Tallereando  

Juberto Bejarano Soto


No se me ocurre nada
ningún poema a escribir
ni a una flor ni a una hada
ya que la poesía se debe sentir

Y yo no siento nada
no tengo ninguna idea
de qué escribir en el cuaderno
ni poesía clásica o un rap moderno

Pero juro por el macho Camacho
que todo esto me marea
pero esto ya me estresa
ya casi ni me interesa

Cuando escucho de poesía
yo corro con mi tía

Romeo, Romeo
de tan feo no te veo
cuando pasas por las calles
tú piensas en bellos valles

El tiempo ya no alcanza
el poema es para hoy
creo que yo aquí le dejo
yo mejor de aquí me voy

martes, 8 de marzo de 2022

Olvidada en la primaria Leona Vicario

Daniela Gómez Chávez


Eran los años veinte en Mexicali, Baja California, cuando una nueva escuela forjaba sus cimientos en la que después sería la avenida Reforma.

Veintiséis años más tarde, la década de los años cincuenta, sin duda, fue muy importante para nuestra hermosa ciudad: en 1952 Baja California fue declarada un Estado Libre y Soberano, teniendo a Mexicali como su capital, que poco después de erigiría como municipio.

Gracias a todas las personas que cruzaban la línea fronteriza a diario, la ciudad incrementó su población, que para aquel entonces estaría conformada por un poco más de 120 mil habitantes, distribuidos entre la zona urbana y su hermoso valle.

* * *

En esta escuela había una bella maestra pianista. Sus clases eran siempre en el salón de música ubicado enfrente de la gigante puerta principal. El salón era blanco y en cada esquina de éste se podían escuchar las notas provenientes de aquel piano negro cuando la maestra lo tocaba.

Era el último día de clases del ciclo escolar en curso. Los niños anhelaban dormir catorce horas seguidas, ver televisión y no pensar en ningún maestro, y los maestros solamente querían dejar de escuchar a los alumnos pelear o dar excusas de por qué se les había olvidado la tarea.

Sonó la campana de salida y todo el mundo salió disparado, menos la bella maestra pianista, quien se quedaba todos los días hasta altas horas de la noche solo para seguir tocando el que ella sentía como el instrumento más hermoso de todos.

* * *

Sin embargo, esa ocasión sería muy diferente a todas las demás. La escuela quedó vacía. Eran aproximadamente las nueve de la noche. La maestra, después de su ensayo vespertino, planeaba regresar a casa para disfrutar de sus dos meses de vacaciones.

Pero no se esperaba que, al llegar a la única puerta de salida, ésta se encontraría cerrada. Sin ninguna alternativa decidió dejar de luchar, alguien vendría por la mañana y la sacaría de aquel oscuro salón. Así cedió a la oscura noche y se inundó en un sueño profundo.

Los días pasaron y nadie parecía dar un solo paso por la escuela. La maestra no podía más con el hambre, la sed la mataba. Después de su primer mes,  quedó postrada en el umbral de la puerta, dando su última respiración mientras admiraba el hermoso piano negro que solía brindarle tanta felicidad.

* * *

Después de tantos años, en Mexicali se cree que aquella pianista sigue rondando la vieja escuela, y que a altas horas de la noche se puede escuchar cómo toca su adorado piano con una belleza espectacular.

¿Será la maestra intentando decirnos algo, intentando que la notemos? No se sabe. Pero, por lo pronto, lo único que podemos hacer es disfrutar de sus hermosas melodías y revisar todos los salones antes de cerrar.

Tercer semestre de preparatoria (2015).


viernes, 4 de marzo de 2022

La importancia de tener una vida saludable

Pedro André Hernández Acosta


Buenos días, profesor y queridos compañeros de clase.

Hoy tengo la oportunidad de dirigirme a ustedes para platicarles sobre la importancia de tener una vida saludable.

¿Por qué escogí este tema?

Decidí hablar sobre este tema porque quiero que la gente que no tiene una vida saludable reflexione y comience a tenerla, ya que lo contrario puede traer serios problemas.

Triste y lamentablemente, cada vez más la gente cae en las manos y las mentiras de la mercadotecnia. Al caer en esto, las personas consumen comida chatarra y dejan de hacer ejercicio, aunque hay algunas que llevan toda su vida con este estilo de vida. ¡Tal vez muchos no le van a dar importancia a esto y me dirán que viven así y no les pasa nada! Pero créanme que en un futuro su cuerpo ya no lo soportará más.

El principal factor para que un niño o adolescente se desarrolle bien es que tenga una buena alimentación. Por eso, desde pequeños hay que tener una alimentación con todos los nutrientes necesarios para nosotros. Al llevar una buena alimentación se pueden prevenir la diabetes, el cáncer, la obesidad, entre otras cosas.

Hay personas que llevan una mala alimentación y tienen obesidad o sobrepeso. Ellos corren el riesgo de morir, ya que, según datos de la Organización Mundial de la Salud, fallecen alrededor de 2.6 millones de personas al año a causa de la obesidad o el sobrepeso.

Para tener una vida saludable no solo se necesita alimentarse bien, también es necesario hacer ejercicio, tomar MUCHA agua y dormir bien.

Tu cuerpo se sentirá bien con treinta minutos de ejercicio, o puedes intentar dar diez mil pasos a lo largo del día. Con esto tu cuerpo se sentirá más saludable. Para poder rendir mientras te ejercitas y también rendir a lo largo del día, necesitas beber al menos dos litros de agua. Si no haces esto, puedes deshidratarte.

Estudios afirman que las personas que duermen seis horas o menos rinden mucho menos que las que duermen de siete a ocho horas.

Sé que no soy la persona adecuada para contarles esto, ya que yo padezco insomnio. Pero voy a contarles algo sumamente importante: el año antepasado tenía una vida, se puede decir, normal. Los problemas llegaron cuando me diagnosticaron disautonomía. Este problema de salud comienza con una falla en el corazón, esa falla afecta al cerebro y esto a todo el cuerpo. La disautonomía tiene demasiados síntomas, entre ellos está el insomnio. Así que debido a esto dejé de dormir bien y comencé a dormir cuatro horas, tres horas, dos horas, a veces no dormía. A consecuencia de no dormir bien, comencé a tener problemas en mi crecimiento, pues en estos dos años solo he crecido dos centímetros, cuando debí haber crecido doce centímetros…

¿Qué podemos hacer, entonces, para comenzar a tener una vida saludable?

Primero, debemos cambiar nuestra alimentación y comenzar a comer sano. Debemos dejar atrás toda la comida chatarra. Tal vez te puedas dar un gustito una vez a la semana, pero no hay que excederte. 

Segundo, tomar MUCHA agua (al menos dos litros al día) para evitar una deshidratación.

Tercero, hacer ejercicio al menos treinta minutos diarios, o intentar dar diez mil pasos a lo largo del día. Para lograr esto puedes dejar los videojuegos o la televisión y llevar a pasear al perro, o simplemente caminar y disfrutar del día.

Y, cuarto, pero no menos importante: dormir de siete a ocho horas, pues con esto nuestro cuerpo estará bien descansado para el día de mañana.

Les agradezco su atención.

(Segundo grado de secundaria, 2019)


El grave problema de la contaminación

Maya Ixchel Valverde Núñez


Buenas tardes, profesor y compañeros:

El día de hoy me encuentro aquí para demostrar la importancia de NO CONTAMINAR, junto con las consecuencias que ha generado la contaminación y lo que pasará en un futuro si este problema no se resuelve.

Actualmente, tenemos muchos problemas generados a partir de la contaminación. Simplemente, cuando vamos por las calles podemos ver basura en el suelo, bolsas de plástico que se van volando por el aire, botellas de plástico que son aplastadas por los carros, latas, empaques, y muchas cosas más que se encuentran dispersas por la ciudad. ¿Y qué es lo peor de todo? Que este problema ha ido empeorando cada vez más y más, en el transcurso de los años.

En las últimas tres décadas se ha perdido 40% de toda la fauna del país, y, hoy, entre 25% y 30% de la flora y fauna existente se encuentra en peligro de extinción. ¿Cuál es la relación de esta pérdida con la contaminación? Es sencillo: entre más contaminemos habrá una mayor presencia de dióxido de carbono, lo que provocará un desgaste a la capa de ozono y permitirá que los rayos ultravioleta entren de una manera más fácil, provocando lo que conocemos como calentamiento global.

El calentamiento global modifica el hábitat de las especies, por lo que esas especies se encontrarán en peligro, un peligro que fue ocasionado por la contaminación. También, hay ocasiones en que los animales consumen lo que se encuentran en las calles. Entonces… si lo que se encuentran es basura, ¿qué es lo que comerán? Ellos comerán la basura, dañando así su organismo.

La contaminación afecta, además de la flora y la fauna, nuestra salud. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (la OMS), mueren aproximadamente siete millones de personas al año debido a la contaminación atmosférica urbana. Los efectos más comunes debido a este tipo de contaminación son: enfermedades respiratorias, fatiga, dolor de cabeza, ansiedad, daños en el hígado y problemas cardiovasculares.

Yo tengo una abuela que vive en la Ciudad de México y, como saben, esta es una ciudad donde hay demasiada contaminación. Hace un año, mi abuela comenzó a tener problemas respiratorios, y lo que pasó es que había desarrollado asma. Cuando fue con un doctor, este le dijo que su asma se debe a la contaminación atmosférica. En el transcurso de ese año, su padecimiento empeoró. Pero… ¿por qué sucedió esto? Pues si su asma se debe a la contaminación, y la contaminación en la ciudad empeora, es lógico que su enfermedad empeore.

La OMS estima que alrededor de 235 millones de personas en el mundo sufren de asma debido a la contaminación. Si la contaminación en la ciudad empeora aún más, ¿qué pasará luego?: habrá más personas enfermas, habrá más de 235 millones de personas en el mundo con asma. El número de muertes ya no será el mismo, sino irá aumentando.

Por lo tanto, ocupamos reflexionar algo: la población mundial sigue en aumento, nosotros seguimos contaminando; cada vez más y más especies desaparecen y las enfermedades se hacen más presentes. Si tomamos todo eso en cuenta... ¿qué será de la vida en un futuro? La respuesta es muy obvia: dejaremos un mundo en pésimas condiciones para las futuras generaciones, y, además, acortaremos el tiempo de vida de nuestro planeta.

Tal vez no podamos dejar de contaminar por completo, pero lo que sí podemos hacer es tomar medidas para contaminar lo menos posible. Podemos iniciar con pequeñas acciones, como: en vez de usar el automóvil usar la bicicleta o caminar; también podemos reciclar, emplear menos plástico y muchas cosas más. Pero cualquier acción ayuda, porque cada pequeña acción es importante.

Por eso, nos corresponde a nosotros encargarnos de cuidar de nuestro planeta, para que futuras generaciones puedan vivir adecuadamente y para que dejen de desaparecer especies, porque lo que todos queremos es prosperar y vivir en un mundo sano donde los niños puedan salir a jugar sin preocuparse de enfermarse debido a la contaminación que hay en el exterior.

Gracias por su atención.

(Segundo grado de secundaria, 2019)