Cuando faltaba ya
una semana para salir de la secundaria fue cuando comencé a pensar que en menos
de un mes y medio ya estaría entrando a la preparatoria. Desde ahí me puse a
pensar que ya estaba grande, y que mientras más crezco menos dura la escuela,
se pasa muy rápido el tiempo.
Desde pequeño he
tenido una pequeña idea de lo que quiero llegar a estudiar: me atrae mucho todo
lo que tenga que ver con aparatos o artefactos tecnológicos, así que me interesaría
ser ingeniero. No sé aún cuál de las muchas ramas que tiene la ingeniería
escoger, pero espero que a lo largo de estos tres años en la preparatoria me
oriente bien hacia una carrera muy buena y que me guste.
Elegí el Instituto
Salvatierra porque, a pesar de haber cursado la secundaria ahí también, hubo un
momento en el que consideré alguna otra preparatoria. Pero algo que me llamó la
atención fue que en ninguna otra prepa vi unión en la vida estudiantil, más que
en el Salva. En otras escuelas como que no saben manejar muy bien el lado
académico, y nada más eso. También ese aspecto es muy importante, pero de igual
manera tiene que haber una comunidad que conviva y trabaje esa convivencia.
Mi opinión es que
la parte social en una escuela es muy importante, incluso diría que un poco más
importante que la parte académica. Y lo digo porque en el bachillerato es donde
conoceré –y los que entren conocerán– a las personas más importantes en toda la
vida, que estarán presentes en ella, se vean o no se vean. Y esto lo afirman
muchos de los ex alumnos del Salvatierra.
Una cosa que espero
de la preparatoria del Salva es el ambiente de unión, que espero que esté
presente en las paraescolares. Donde lo he visto es en eventos, porque todas se
unen para cumplir el propósito común. Un ejemplo sería el Día de Muertos, que
se ha convertido en una tradición del Salva, y ahí es donde todas y cada una de
ellas trabajan en conjunto: Artes se encarga de las decoraciones; Música, del
entretenimiento con canciones tradicionales; Teatro, con obras que traten del
tema, y todas las paraescolares deportivas se encargan de vender la comida
tradicional.
Uno de mis
favoritos es el rally que se hace
entre todos los semestres de preparatoria. No me ha tocado esto, pero dicen que
es una de las mejores experiencias que vivirás en el Salva. No conozco muy bien
la mecánica, pero es un poco similar al de la secundaria; solo que, como ya
somos más grandes, es mucho más extremo. Las actividades están muy bien puestas,
porque se juntan bien al terminar actividades académicas.
Mi mayor ansia en
mi tiempo en prepa es ya estar en orientaciones sobre qué estudiar. Quiero que
me orienten muy bien. El profesor Arturo Rangel tiene mucha fama, por acertar
en cada uno de sus alumnos la carrera perfecta. Así quiero que pase conmigo, yo
no quiero ser la excepción.
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