lunes, 6 de agosto de 2018

Un interesante cuento de misterio y suspenso

Alexandra Pamela Maese Urrutia


El cuento “Atrapado” fue escrito por la estudiante del Instituto Salvatierra Yara Melissa Montenegro Rodríguez, quien cursaba el tercer semestre de preparatoria en 2016, cuando lo creó. Ella disfruta escribir y leer relatos de suspenso y romance.
En “Atrapado”, un chico cuenta que está pasando por varios problemas que lidia junto a su madre, incluyendo la muerte de quien era su padre. Buscando una vida nueva, ambos se van a Houston, donde localizan a quien es el abuelo del narrador; posteriormente relata que el anciano desaparece dentro de su casa y menciona un cuarto bajo llave.
Este es un cuento realista, ya que, en toda su extensión, no se incluyen elementos fantásticos y todo lo escrito puede ser realidad.
Los personajes principales son el hijo y su madre, pues son quienes pasan por la crisis emocional que es gran parte de la trama; los personajes secundarios son el padre y el abuelo, ya que sin ellos no se darían las problemáticas mayores del cuento; y los personajes ambientales son los amigos del narrador, que se mencionan y sí son parte de la historia, aunque no influyen en la trama.
El narrador es protagonista, lo que se puede ver aquí: “En estos momentos escucho voces”. El personaje principal es quien cuenta su historia.
Los espacios de “Atrapado” son la casa en Beverly Hills, donde vivían el hijo y su madre, y la casa del abuelo; aquí es donde la trama progresa, junto a su crisis. El tiempo es el año 2016: “El 24 de marzo de 2016, otra tragedia...”. La atmósfera es de misterio y suspenso: “El comportamiento de aquel hombre... era muy extraño”, “No podía contener mi curiosidad”.
El método narrativo es in extrema res, ya que la historia se narra desde el desenlace. El tiempo narrativo es el retrospectivo y se aprecia en este fragmento: “Mi padre fue asesinado al salir de su oficina”, donde se hace referencia al pasado.
La función emotiva de la lengua se puede identificar muy bien en la siguiente cita: “Esta culpa no me ha dejado desde entonces”. La función poética es utilizada correctamente de varias maneras, como por medio de la adjetivación: “Estaban llenas de sangre fresca, al igual que las paredes. Con las piernas temblorosas caminé un poco más y vi jaulas vacías”.
En conclusión, es un cuento muy bien escrito, con una trama de suspenso muy interesante y sencilla para comprender. Solo agrego que se pudo haber indagado un poco más en la vida de los personajes y sus motivos.

Referencia:
Montenegro Rodríguez, Yara Melissa, “Atrapado”. Disponible en: https://nuevotallereando.blogspot.com/2017/06/atrapado.html


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